domingo, 2 de febrero de 2014

Carta a Olentzero, los Reyes Magos, Papa Noel, Santa Claus y demás compañeros.




 Hola a todos,  quería haceros partícipes de algo que me preocupa.

Después de haber leido el informe de la ONG Save the Children sobre la situación nforme en el que se analiza el impacto que la pobreza infantil está teniendo en los derechos de los niños y las niñas en España, la verdad es que se te queda un mal cuerpo...

 Los datos son escalofriantes.En un pais como este, el que tengamos a 2,8 millones de niños y niñas que viven en riesgo de pobreza o de exclusión social, es tremendo.Estamos hablando de menores de 16 años, menores que muy posiblemente no pueden comer  trutas y verduras frescas todos los días, que no tienen libros adecuados a su edad y nivel de conocimientos, que no  tienen al menos un juego para jugar, que no pueden asistir a actividades extraescolares, que no tienen ocasión es estrenar ropa de vez en cuando, etc.
La lectura de este informe ha despertado algunos de mis mejores recuerdos


Cuando yo era un crio, en mi casa no había alegrías. Mi padre que era un zapataro remendón (de esos que arreglaban zapatos), tuvo que trabajar muchas horas al día para darnos de comer, vestirnos, ir a la escuela y para que nunca nos faltara un juguete para poder disfrutar. Incluso llegamos a tener una tele en color ¡Que demasiado!

Todavía me acuerdo de los 3 juguetes que fueron más importantes para mi:
El primero: mi traje de vaquero.Participe en la conquista del Oeste y me enfrente en multitud de ocasiones a los apaches. Siempre gane todas las batallas, Jerónimo y toda su cuadrilla de indios no tuvieron nada que hacer conmigo.


El segundo regalo importante, fue cuando consegui tener un balón de cuero. Si, uno de esos con los que jugaban los futbolistas de verdad. Uno de esos balones, que cuando lo hinchabas  a tope, no podías ni darle patadas, porque te dolían los pies.



Y el tercer regalo, fue la bicicleta!! Una bici roja, que al principio me decepciono. Yo quería una bici de corredor. Supongo que para entonces, ya habría  oido hablar de Anquetil, de Coppi, de Bahamontes..
La bici era demasiado grande para mi, me tenían que ayudar a montar. Si me sentaba en el sillín, no llegaba a los pedales. Al cuarto día ya no importaba, ya era mi bicicleta favorita.

File:Bicicleta Orbea (de la decada de 1970) 01.JPG

Ya véis, no teníamos casi nada, pero si nos comparamos con muchos niños y niñas de hoy día, con cualquiera de esos 2,8 millones, éramos unos privilegiados. ¿Que esta pasando ahora?
Si la protección de los niños y las niñas frente a la pobreza es un derecho, una obligación y una inversión, ¿Por que nuestros gobernantes no se ponen manos a la obra? 
Las politicas de austeridad estan afectando de forma importante a las familias, a muchas familias, con lo cual debilitan y merman la protección de los más pequeños frente a la pobreza.
Casi 6 millones de parados y 1,8 millones de hogares con todos sus miembros en paro, no auguran nada bueno. Los niños y niñas de hoy son el presente y el futuro de este país y los estamos abandonando. Muchos de ellos, no van a tener opción de demostrarnos lo que hubieran sido capaces de hacer. 
El año que viene cuando nuestros gobernantes os escriban las carta pidiendo sus regalos, no les traigáis nada, no se lo merecen. Mirar que pais nos estan dejando:
Miles de niños deshauciados y expulsados de sus casas, 10 mil millones de euros regalados a la iglesia católica, miles de millones de euros gastados en prepararnos para la guerra, cientos de millones de euros defraudados y malversados, miles de millones de euros para rescatar a la banca, cientos de millones de euros para seguir manteniendo a políticos ineptos... y así podría seguir hasta aburrirme.
Tenemos que pedir a la gente que salga a la calle y que exija una a nuestros gobernantes una actuación eficaz contra la pobreza infantil.
En un momento de crisis como el actual, tenemos que recordar a nuestros gobernantes que los derechos humanos (todos los derechos humanos), tienen una línea rija que no se puede traspasar.