¡Hay
demasiadas cosas que jamás podremos perdonarte, Manuela!
El
que el Ayuntamiento de Madrid haya conseguido negociar con la banca, que los
desahucios sean noticia porque no se ejecutan y que se hayan puesto pisos vacíos
en alquiler social, para los más necesitados, no te lo podremos perdonar.
Tampoco
te perdonaremos haber situado a Madrid, en el círculo de capitales solidarias,
con un Ayuntamiento que va a destinar un presupuesto de 10 M de €, en ayudar a los
refugiados ofreciéndoles hogares
permanentes, atención psicológica, escolarización y todo el apoyo burocrático
necesario para que encuentren en Madrid una nueva ciudad en la que vivir.
Por
supuesto, nunca tendrás perdón por la lucha
emprendida contra el despilfarro y la corrupción. El que los bolsillos
de los ciudadanos se hayan ahorrado 30 M de € en gastos superfluos y sueldos
desorbitados, es imperdonable Manuela.
No
te digo nada, del pecado capital que has cometido, con querer retirar de muchas
calles de Madrid, la simbología, nombres y todo aquello que recuerde al
franquismo. El que las entrañas de los franquistas se retuerzan de rabia, no
tiene perdón Manuela.
¿Y
que es esa locura del “Madrid Orgulloso”? ¡Tu que te has pensado Manuela!
¿Cómo
se puede apostar por un Madrid moderno y creativo, que cree en la diversidad y
en los derechos humanos y civiles, incluso de gays, transexuales y lesbianas?
¡Todo eso no tiene perdón Manuela!
Y no
hablemos de cómo ha mejorado la situación de la infancia en Madrid.
El
hecho de que el Ayuntamiento haya atendido a un total de 31.000 menores, y que
casi 10.000 de ellos se hayan acogido a los programas diseñados para cubrir sus
necesidades alimenticias, no tiene perdón. ¡A ver si te enteras Manuela!
Bueno,
pero no todo es malo. Yo te perdono lo de los tuits de Zapata, lo de los
Titiriteros, lo de Wanda, e incluso lo
de los Reyes Magos. Pero hay una
cosa que no te perdonare jamás Manuela
Carmena: ¡Que hayas mandado a la oposición a una grande de España!